Entre tanto debate por la IA, contenido repetitivo en redes sociales y tendencias de pensamientos que duran menos de una semana, ¿dónde queda espacio para la repensarnos auténticamente? Es una contradicción en sí misma este post, nada de lo que pueda transmitir por acá y nada de lo recibido por este medio incentiva a esa reflexión. Pero el problema no es el contenido, es el formato. Las palabras o imágenes se nos cruzan y luego desaparecen como burbujas en el océano virtual.  Así y todo, fuera de este contexto -cuando no estamos leyendo cosas como estas-, el mundo sigue, desde ░